Mercury
Fabricantes de Estados Unidos

Tomando el nombre del dios romano Mercurio, Ford fundaría en 1939 la división Mercury para comercializar automóviles de semilujo situados entre los modelos populares de Ford y los lujosos Lincoln. En 1945 se fusionaría con la división Lincoln en la Licoln-Mercury Division con la esperanza de que la marca fuera conocida más como un asequible Lincoln en lugar de un lujoso Ford. En 1958 la fusión con Edsel daría lugar a la Mercury-Edsel-Lincoln Division, pero con la desaparición de Edsel en 1960 la división de Ford volvería al nombre de Lincoln-Mercury.

Mercury, al igual que Edsel, sería creada desde cero, en lugar de ser una adquisición de una empresa ya existente como Lincoln, y su apogeo llegaría en las décadas de 1950 y 1960, cuando su fórmula de estirar y reducir las plataformas existentes de Ford para construir nuevos modelos demostró ser un gran éxito y ya en los años siguientes comenzaría a distanciarse de Ford y a ofrecer diseños independientes, aunque esta aventura duraría poco tiempo y desde finales e la década de 1970 la marca se uniría de nuevo a Ford ofreciendo coches similares a los vendidos bajo la marca Ford.

Desde su fundación, los modelos fabricados por Mercury serían reconocidos como automóviles con un gran rendimiento y lujoso equipamiento como por ejemplo su primer modelo: el Mercury Eight de 1939, diseñado para ser una alternativa más elegante y sofisticada del Ford V8. A lo largo de las décadas de 1940 y 1950, Mercury continuaría desarrollando su línea de automóviles de precio medio, presentando nuevos modelos como Mercury Monterey, Mercury Montclair y el Mercury Park Lane. Estos coches presentarían interiores cada vez más lujosos y características avanzadas como aire acondicionado, ventanas eléctricas y asientos eléctricos.

En la década de 1960, Mercury comenzaría a centrarse en automóviles más orientados al rendimiento, con modelos como el Mercury Comet o el Mercury Cougar, creados para atraer a un consumidor más joven que buscaba motores potentes, estilo deportivo y sistemas avanzados de suspensión y frenado. En las décadas de 1970 y 1980, Mercury siguió desarrollando una gama de modelos de alto rendimiento y automóviles de precio medio, como el Mercury Capri y el Mercury Marquis. Sin embargo, la marca comenzó a tener problemas ante la creciente competencia de otras constructores de precio medio como Buick y Oldsmobile, así como de compañías foráneas como Toyota y Honda.

Esta competencia llevarían a la división de Ford a reinventarse ofreciendo modelos como la furgoneta Mercury Villager y el SUV Mercury Mountaineer. Sin embargo, estos modelos no lograrían captar una atención significativa en el mercado y, en 2011, Ford anunciaría que la marca Mercury desaparecería por completo.


Mercury Turnpike Cruiser

El vehículo
El Mercury Turnpike Cruiser fue un automóvil de tamaño completo producido por la división de Ford entre 1957 a 1958 cuyo objetivo era el de presentar un modelo capaz de competir en lujo y prestaciones con otros automóviles estadounidenses de alta gama de la época, como el Cadillac Series 62, el Chrysler 300, el Chevrolet Impala o el Ford Thunderbird entre otros. Su diseño se inspiraría en el popular estilo de carrocería con capota rígida desmontable presentada sobre un chasis sin pilares que le otorgaba al automóvil un aspecto más elegante. Asimismo, el Turnpike Cruiser contaría con detalles cromados en todo su cuerpo y distintivas tomas de aire en los guardabarros delanteros.

Para destacarse de la competencia, el Turnpike Cruiser incluiría características innovadoras como una ventana trasera retráctil con bisagras en la parte superior y que se podía abrir con solo tocar un botón llamada Breezeway, diseñada para proporcionar ventilación a los pasajeros del automóvil permitiendo que el aire fresco circulara por el interior del automóvil. Además montaría en el tablero un tacómetro y un velocímetro que mostraba la velocidad del automóvil en millas por hora y kilómetros por hora.

Debajo del capó, el Mercury Turnpike Cruiser estaba propulsado por un motor V8 de 368 pulgadas cúbicas (6.0 litros), que era capaz de producir hasta 335 caballos de fuerza transmitidos al eje trasero mediante una transmisión automática de tres velocidades que impulsaría al coche hasta casi los 180 km/h y proporcionaría una aceleración de 0 a 100 km/h cercana a los diez segundos con un consumo de alrededor de 20 litros a los 100 km/h. Unas cifras bastante competitivas para un automóvil de dos toneladas de peso y más de cinco metros de largo.

Además de estas especificaciones de rendimiento, el Mercury Turnpike Cruiser también tenía una serie de características diseñadas para mejorar su manejo y calidad de conducción. Por ejemplo, tenía un centro de gravedad bajo, lo que ayudaba a mejorar la estabilidad en las curvas. También tenía una suspensión delantera y trasera que fue diseñada para absorber golpes y mejorar la comodidad de conducción. Finalmente, la dirección asistida y los frenos asistidos del automóvil hicieron que fuera más fácil de manejar y detener, incluso a altas velocidades. También se comercializaría como un automóvil seguro, con características salpicadero y paneles de las puertas acolchados así como cinturones de seguridad.

En general, el Turnpike Cruiser sería un automóvil de alto rendimiento que ofrecía una combinación de potencia, velocidad y características de lujo que serían populares entre los compradores en ese momento. Sin embargo, a pesar de sus innovaciones y su sólido rendimiento, las ventas del coche no serían las esperadas por Mercury y la producción se suspendería tan sólo dos años después de su puesta a la venta.

1957
Mercury Turnpike Cruiser
Yat Ming
Referencia: 94253

La miniatura
Yat Ming comenzaría la producción de modelos a escala a mediados de los años 70 en China con especial dedicación a las escalas 1/18, 1/24 y 1/43. A finales de la década de 1990, comenzaría a fabricar clásicos americanos a escala 1/43 que posteriormente serían utilizados en distintos coleccionables editados en Europa con esta temática como eje de la colección. Posteriormente, Yat Ming vendería bajo la denominación Road Signature muchos de estos modelos con diferente color pero con los mismos acabados y ampliaría su gama a otros fabricantes e incluiría camiones de bomberos antiguos que estarían en producción hasta que la compañía cerrara sus puertas en 2013, siendo comprada entonces por Lucky Die Cast que vende desde 2015 los mismos coches que en su día vendía Yat Ming. En general, las miniaturas están bien detalladas y terminadas sobre unos moldes correctos considerando su bajo precio, tanto en versión de coleccionable o de tienda y ofrece una buena oportunidad para los coleccionistas, sobre todo a los aficionados a los exuberantes modelos americanos posteriores a la Segunda Guerra Mundial, de tener buenas reproducciones a un precio insuperable.


Mercury Marauder

El vehículo
Con el nombre de Marauder, Mercury fabricaría tres modelos entre 1963 y 2004. La primera generación del Mercury Marauder estaría a la venta entre 1963 y 1965, la segunda entre 1969 y 1970 y la tercera entre 2003 y 2004, las tres situándose en el nicho de automóviles de lujo con un rendimiento deportivo. El Mercury Marauder de primera generación era un vehículo de tracción trasera basado en la plataforma del Ford Galaxie que estaría disponible con techo rígido de dos puertas o sedán de cuatro puertas, presentando la opción de equipar tres de motores V8: un 6.4 litros que era ofrecido como el modelo de entrada, una unidad de 6.7 litros y la más potente de 7.0 litros.

El Mercury Marauder se comercializaría como un automóvil de lujo de alto rendimiento, con un enfoque hacía la comodidad y el estilo, además del rendimiento. Contaría un interior espacioso con asientos de cuero y detalles en madera, así como una variedad de características como ventanas eléctricas, dirección asistida y aire acondicionado. Además, utilizaría una distintiva línea de techo fastback y un diseño único de parrilla delantera que lo diferenciaba de otros modelos de Mercury de la época. El automóvil también estaba disponible con una serie de opciones incluyendo una suspensión más dura, frenos más potentes y transmisión manual de cuatro velocidades y una automática de tres, de serie el vehículo tendría una caja de cambios manual de tres relaciones.

En términos de rendimiento, el Mercury Marauder de primera generación sería un automóvil rápido y capaz. A modo de ejemplo, con los 250CV que generaría con el motor V8 de 6.4 litros acoplado a una transmisión manual de tres velocidades, el automóvil podía acelerar de 0 a 100 km/h en alrededor de nueve segundos llegando a alcanzar una velocidad máxima de alrededor de 190 km/h. No obstante sus potentes motores y características de rendimiento, la producción de la primera generación sería suspendida tras fabricarse cerca de 15.000 unidades.

1964
Mercury Marauder
Yat Ming
Referencia: 94250

La miniatura
Yat Ming comenzaría la producción de modelos a escala a mediados de los años 70 en China con especial dedicación a las escalas 1/18, 1/24 y 1/43. A finales de la década de 1990, comenzaría a fabricar clásicos americanos a escala 1/43 que posteriormente serían utilizados en distintos coleccionables editados en Europa con esta temática como eje de la colección. Posteriormente, Yat Ming vendería bajo la denominación Road Signature muchos de estos modelos con diferente color pero con los mismos acabados y ampliaría su gama a otros fabricantes e incluiría camiones de bomberos antiguos que estarían en producción hasta que la compañía cerrara sus puertas en 2013, siendo comprada entonces por Lucky Die Cast que vende desde 2015 los mismos coches que en su día vendía Yat Ming. En general, las miniaturas están bien detalladas y terminadas sobre unos moldes correctos considerando su bajo precio, tanto en versión de coleccionable o de tienda y ofrece una buena oportunidad para los coleccionistas, sobre todo a los aficionados a los exuberantes modelos americanos posteriores a la Segunda Guerra Mundial, de tener buenas reproducciones a un precio insuperable.


Mercury Cyclone

El vehículo
La denominación Cyclone se aplicaría por primera vez a un automóvil de Mercury en 1964 para nombrar a la versión de alto rendimiento del Comet. Bajo este nombre, el Mercury Comet Cyclone estaría a la venta hasta 1967 con un motor V8 de 4.7 litros, que luego se instalaría también en las versiones más deportivas del Ford Mustang. El coche estaría en el mercado como un cupé cerrado y convertible de dos puertas de tracción trasera y desde 1967, Mercury lo fabricaría como un Muscle Car, basado en la mecánica del Ford Torino pero como uh modelo separado de la gama del Comet, que estaría en fabricación hasta 1971.

Durante sus años en producción, el Cyclone, tanto como parte de la gama Comet o como modelo de propio derecho, recibiría diversas actualizaciones estéticas y mecánicas. Por ejemplo, la unidad V8 aumentaría su cilindrada hasta los 6.4 litros con la llegada del modelo de 1966 y hasta los 7.0 litros con el de 1969. Ese año, también se ofrecería un motor de 5.7 que junto al lanzado en 1968 de 4.9 litros, compondría la oferta de motores que el Mercury Cyclone tendría a su disposición según las versiones.

Estas se corresponderían con diferentes paquetes de accesorios que darían lugar al Cyclone GT, luego al Cyclone Cobra Jet y Cyclone Spoiler, similares externamente a excepción del Spoiler, una versión de producción limitada con características claramente deportivas que equiparía faldones delanteros y traseros, acabados especiales, franjas decorativas especiales y un diferencial de deslizamiento limitado.

Los primeros modelos del Mercury Cyclone se identificarían fácilmente por las dos grandes tomas de aire en el borde delantero del capó, mientras que en las versiones posteriores se renovaría por completo tanto la apariencia del faldón delantero como la parte trasera de la carrocería, incluyendo faros retráctiles delante y dos pares pilotos de triple lámpara y un parachoques de estilo diferente en la parte trasera.

Tras más de 90.000 unidades ensambladas, el creciente endurecimiento de la normativa sobre emisiones de gases contaminantes en los Estados Unidos pondría fin a la era de los Muscle Car y en 1971 el Cyclone se integraría como modelo de alto rendimiento en la gama Montego con el nombre de Montego GT, del que apenas se ensamblarían 30 modelos, poniendo punto final a la comercialización del Mercury Cyclone.

1968
Mercury Cyclone
IXO Models/Altaya
Colección: American Cars - Nº 32/-

La miniatura
A finales de septiembre de 2019, la editorial Altaya ponía a la venta mediante suscripción en su página web la colección American Cars con los modelos más emblemáticos producidos en los Estados Unidos a lo largo de los años. Las miniaturas, como en la mayoría de las colecciones ofrecidas por esta editorial, son fabricados por IXO Models y cuentan con un excelente nivel de detalles y acabados habida cuenta el bajo precio de venta: 2,99€ el número uno, 7,99€ el segundo y 14,99€ a partir del tercero con una colección prevista a 80 ejemplares.


Mercury Cougar

El vehículo
El Mercury Cougar de primera generación, fabricado entre 1967 y 1970, sería diseñado como una alternativa deportiva y lujosa al Ford Mustang, automóvil con el que compartiría muchos componentes aunque tendría una distancia entre ejes más larga y un interior más lujoso. Producido en varios acabados, uno de los más populares sería la versión XR-7, esta denominación hace referencia a un término de mercado acuñado por Mercury para resaltar las características lujosas y el rendimiento deportivo del automóvil, Extraordinarily Ravishing 7 o Extraordinariamente deslumbrante 7 en español. Esta versión de alto rendimiento se presentaría en 1968 como una versión más lujosa y deportiva del Cougar, presentando una gama de características orientadas al rendimiento y un interior más refinado.

Una de las características más distintivas del Mercury Cougar XR-7 sería su estilo exterior, diseñado para ser más refinado y exclusivo que el modelo Cougar estándar. El automóvil presentaría un capó largo y una plataforma corta, con un perfil aerodinámico que le daría un aspecto deportivo y elegante. En su interior, el Mercury Cougar XR-7 presentaría un interior más refinado con una variedad de características de lujo, como asientos de cuero, detalles en madera, ventanillas eléctricas, dirección asistida y aire acondicionado.

Bajo su capó, el Mercury Cougar XR-7 dispondría de dos motores V8: uno de 4.8 litros que generaría cerca de 200CV combinado con una transmisión manual de tres velocidades de serie (como opción se ofrecería una transmisión manual de cuatro velocidades o una transmisión automática de tres), un V8 de 6.4 litros y 335 caballos de fuerza acoplado a la transmisión manual de cuatro velocidades, como opción estaría la caja de cambios automática de tres velocidades. Además de sus potentes motores, el Cougar XR-7 también ofrecería suspensión deportiva, potentes frenos y un diferencial de deslizamiento limitado. Estas características ayudarían a mejorar el manejo y el rendimiento general del automóvil, convirtiéndolo en un modelo muy popular entre los entusiastas.

1968
Mercury Cougar XR-7
Universal Hobbies/Delprado
Colección: Car Collection - Nº 42/70

La miniatura
En 1999, la editorial española DelPrado publicaría la primera colección de miniaturas vendida en kioscos conjuntamente con un fascículo. De aparición semanal, la llamada Car Collection incluiría 70 modelos, en otros países también sería publicada con un número de 85 modelos en Francia (con el mismo nombre que la colección española) y el Reino Unido (como Car Collection Series), que repasaban la historia del automóvil desde la década de 1900 hasta la de 1990. Las réplicas, realizadas en China, contarían con moldes fabricados por Universal Hobbies que utilizaría tanto los suyos propios como de otros fabricantes como Kyosho, Anson o Biante entre otros fabricantes.

La colección sería reeditada en España en el año 2003 con un primer número doble al precio de 5,95€, costando el resto de entregas 8,95€, y que incluirían los 70 modelos anteriores de la primera edición con algunos pequeños retoque como antenas o cambio de color. Las miniaturas incluidas en la obra contaban con un buen nivel de acabados en sus moldes y una aceptable calidad general habida cuenta su bajo precio, hasta tres veces inferior en productos similares disponibles en tiendas, y que como punto a favor tenía el poner en manos del coleccionista réplicas nunca antes realizadas en escala 1/43.